Habita tu cuerpo y redescúbrelo intimamente. Permite emerger tu movimiento auténtico guiado por el instinto humano-animal. A reconocer tus energías y ponerlas al servicio de la vitalidad. Erotizando tu naturaleza, agradeciendo tu existencia. Una meditación danzada para disolver el ego en esencia divina.
Respira. Habítate. Moviliza. Reconócete. Exprésate. Expándete. Endiósate. Enamórate.
Con amor, Alan Bliss y Alana Carlasia